Vender una casa con la ayuda de una inmobiliaria suena fácil. Y sí, lo es, mucho más que hacerlo por tu cuenta porque corres el riesgo de volverte completamente loco con tantas gestiones y negociaciones.

Pero hay que tener una cosa en cuenta.

Aunque la inmobiliaria te facilita muchísimo el proceso de venta de tu vivienda, tú también debes aportar cierta documentación y contribuir.

¿La realidad? Esta lista de requisitos parece una yincana burocrática.

Pero descuida, que no es para tanto si sabes lo que te van a pedir y por qué. Aquí te contamos qué piden las inmobiliarias para vender para que puedas ir lo mejor preparado posible.

¿Cuáles son los requisitos para vender una casa por inmobiliaria?

Lo primero que te va a pedir una inmobiliaria es claridad.

Sí, suena genérico, pero significa que necesitan saber si todo está en regla: desde los papeles de la casa hasta si hay cargas hipotecarias o problemas legales.

A ti no te gustan las sorpresas. A los compradores, tampoco.

Así que lo mejor es tener todo bien atado desde que comienza la relación laboral.

Esto se debe a que una inmobiliaria no se puede permitir vender algo que esté «a medias». Su reputación va en juego, y además, una vivienda con problemas legales se queda estancada en los portales, sin visitas ni ofertas.

Por eso, van a revisarlo todo: si eres el dueño, si el piso está inscrito en el Registro, si tienes el IBI al día… Básicamente, quieren asegurarse de que pueden vender tu casa sin sustos.

Además, esto les permite también poder vender tu casa por el mejor precio.

requisitos para vender una casa por inmobiliaria

Documentación imprescindible para iniciar la venta

Gran parte de los requisitos para vender una casa por inmobiliaria son varios documentos, es decir, contar con los documentos necesarios para vender una casa de forma legal y sin complicaciones.
Aquí viene la parte de “papeles, papeles y más papeles”. Pero todos tienen su razón de ser.

Lo básico que te van a pedir incluye la escritura de propiedad, tu DNI, los últimos recibos del IBI, el certificado de eficiencia energética, la nota simple del Registro de la Propiedad, recibos de suministros (agua, luz, gas) y un certificado que confirme que estás al día con la comunidad de propietarios, entre otros documentos.

¿Y por qué tanto documento? ¿Es necesario?

Verás, la inmobiliaria tiene que demostrar al comprador que todo está limpio y en orden. Y también porque sin esta documentación, no se pueden hacer reservas.

Vender y comprar una vivienda es un proceso que requiere mucha inversión, no debe tomarse a la ligera. ¿A quién le gusta perder miles de euros o anclarse a una casa que le da problemas cada pocos meses?

No, no le haría gracia a nadie.

Además, esto puede paralizar o entorpecer la venta. Imagina que aparece un comprador interesado y no puedes avanzar porque te falta un documento. ¡Venta perdida!

Tenerlo todo listo agiliza el proceso y da confianza a quien visita la casa.

Estado y presentación óptima de la vivienda

Este punto es más importante de lo que parece. La presentación no es solo limpieza y orden: es hacer que el comprador se imagine viviendo allí. No hace falta que redecores como si fueras un diseñador de interiores, pero sí que quites el gotelé, arregles los desperfectos y ventiles bien los espacios.

¿Por qué es tan necesario?

Porque una vivienda que entra por los ojos, vende más rápido y mejor. De hecho, las inmobiliarias lo saben, y muchas veces no mueven un dedo si el piso no está mínimamente atractivo. Lo llaman «puesta a punto» o, dicho de forma más profesional, home staging. Esta técnica consiste en preparar la casa para hacerla más atractiva y suele ser casi tan importante como tener la escritura al día.

Un buen estado puede aumentar el precio de venta o, como mínimo, evitar que te lo bajen a la mínima. ¿Por qué ibas a querer perder dinero por no hacer unos simples apaños?

Aspectos legales y administrativos clave

Las inmobiliarias te van a pedir que tengas claro el tema de cargas, hipotecas, usufructos, herencias… Porque nada bloquea más una venta que un papel mal hecho.

Ya no sólo para que el proceso sea lo más ágil y efectivo posible, sino para que también haya transparencia, confianza y seguridad entre las tres partes (inmobiliaria, vendedor y comprador).

Por ejemplo, si la casa es heredada y no has hecho el cambio de titularidad, la venta se paraliza. O si aún debes parte de la hipoteca, hay que gestionarlo todo con el banco.

Y sí, la inmobiliaria te puede ayudar, pero necesita saberlo desde el primer minuto.

Colaboración y comunicación fluida con la inmobiliaria

No importa que tengas los papeles, la casa bonita y todo legal… si no hay buena comunicación, el proceso se vuelve un caos.

Las inmobiliarias valoran mucho a los propietarios que responden rápido, que están disponibles para visitas y que no cambian de idea cada dos por tres.

¿Por qué?

Porque eso les permite trabajar bien, mostrar la casa más veces y vender la casa más rápido.

Es como en cualquier equipo: si uno se descuelga, el ritmo se rompe. Así que si quieres vender sin dolores de cabeza, mantén una relación cercana y profesional con quien lleva tu piso.

Ojo. Al igual que tú debes escoger una inmobiliaria que esté al pie del cañón contigo y te acompañe de la forma más transparente posible.

¿Qué no puede pedirte una inmobiliaria para vender tu casa?

Aquí no todo vale.

Hay cosas que una inmobiliaria no está en su derecho de pedirte. Por ejemplo, no pueden exigir exclusividad si tú no lo has firmado expresamente. Tampoco te pueden imponer un precio de venta si tú no estás de acuerdo, ni cobrarte por adelantado sin que haya mediado un contrato claro.

Tú como propietario tienes que saber dónde están los límites. Una buena inmobiliaria te asesora, pero no te obliga. El control de la venta lo sigues teniendo tú.

Así que si algo no te cuadra, mejor consulta muy bien antes de firmar.

En conclusión

Esperamos que hayas podido aclararte un poco las ideas con qué piden las inmobiliarias para vender.

También que te haya resultado útil toda la información sobre la documentación, la imagen del piso y sobre mantener una comunicación fluida son claves que no puedes ignorar.

Y no es por capricho: es porque cada requisito tiene un sentido. Todos están pensados para evitar problemas, acelerar la venta y lograr un precio justo. Así que, si estás en ese punto de poner el cartel de “Se vende”, tenlo todo bien preparado.

Categorías: Vender

Oscar Amador

Óscar Amador, CEO de Grupogestorr Gestión Patrimonial SL, lidera desde hace más de 20 años una de las agencias inmobiliarias más consolidadas en Torrente, especializada en la gestión y asesoría patrimonial. Como Agente de la Propiedad Inmobiliaria Colegiado y Perito Judicial Inmobiliario, combina su experiencia con certificaciones como la prestigiosa Council Specialist Residential (CRS) de Estados Unidos, que lo avala como un experto en inmuebles residenciales. Detrás de su trayectoria profesional, Óscar es alguien que entiende el valor de las decisiones importantes y así lo demuestra en sus relaciones con los clientes. Su cercanía y empatía lo han convertido en un asesor de confianza que acompaña a las familias en momentos más importantes de su vida.